Beneficios de las semillas de calabaza

Las semillas de calabaza, zapallo, ahuyama o como las conozcas en tu región pueden ayudarnos en muchos aspectos a mejorar la salud al consumirlas. La mayoría de las veces las desperdiciamos y es porque no conocemos primeramente su potencial y luego por no saber prepararlas.

Eso ya no será un problema conoceremos algunos beneficios que nos aportan las semillas de calabaza para mantenernos saludables y también formas de prepararlas para así añadirlas de una vez por todas a nuestra dieta.

Beneficios de las semillas de calabaza

Ayudan a mantener saludable el intestino cuidándolo y manteniéndolo libres de parásitos gracias a su alto contenido en fibra por lo que ayuda a combatir el estreñimiento de igual manera.

Por su alto contenido en proteínas, puede incluso regular el azúcar en la sangre proceso que viene originado por la acción alcalinizante dando como resultado un PH más equilibrado disminuyendo de esta manera la acidez en la sangre originada mayormente por el consumo continuo de azúcar refinada. Siendo muy útil para personas que sufren de diabetes pudiendo con su consumo regular ayudar a mantener el equilibrio los niveles de azúcar en el organismo.




Es usada en muchos casos para combatir la artritis por su efecto antiinflamatorio y analgésico es muy utilizada en estos casos como también en otro tipo de inflamaciones. Puedes consumirla en infusiones para obtener un resultado rápido y puedes consumirla diariamente para ver mejores resultados a largo plazo.

Por su contenido en magnesio, calcio y zinc las semillas de calabaza pueden jugar un papel importante en nuestra salud ósea previniendo la osteoporosis con su consumo regular manteniendo los huesos en buena forma.

Las semillas de calabaza contienen Fitoesteroles y ácidos grasos que nos ayudan a reducir notablemente el colesterol del intestino por lo que facilita la reducción del LDL en la sangre colesterol malo como le conocemos comúnmente.

Como consumir las semillas de calabaza

Tostadas

La mejor manera es tostadas con aceite de oliva: Lavarlas muy bien, y colocarlas a en agua con sal unos 10 minutos a hervir.
Luego las escurren lo más que se pueda y se pasan a una servilleta de manera que les absorba la mayor parte de la humedad que pueda quedarles en una cazuela con un poco de aceite de oliva bien caliente saltearlas luego y colocarles un poco de sal pulverizada. En vez de aceite de oliva puedes colocarle margarina con sal también es buena opción.

Horneadas

Puedes hacerlas dulces de esta manera colocando clavos de olor, canela y azúcar al molde de horno donde las colocaras.
Llévalas a unos 200 grados Celsius y colocarlas con suficiente agua que supere la cantidad de semillas de calabaza deja que se horneen hasta que estén doradas y caramelizadas por el azúcar. Ten en cuenta moderar su consumo de esta manera ya que las semillas de calabaza azucaradas tienen alto contenido en calorías.

Infusiones

Puedes preparar té de semillas de calabaza colocando las semillas en agua hervida por 10 minutos a reposar fuera del fuego para que no se coloque amarga la infusión y puedas disfrutarla a gusto.
También puedes agregarle leche o limón para variar el sabor de la infusión.